martes, 3 de febrero de 2015

Un Espíritu Burlón

Gesto, mímica y proxémia

Ruth: utiliza mucho la expresión facial para dar a entender sus emociones, en especial la rabia, moviendo las manos. Tiene un buen desplazamiento por el espacio, camina por todo el escenario, posee un paso firme, se acerca a los demás personajes sin ninguna dificultad. Entre su esposo, el Sr. Condomine el acercamiento es mayor, ella lo toca en repetidas ocasiones para demostrar su afecto o su molestia contra él. Ruth es en general, un personaje muy dinámico, sus gestos llenan la escena de caracterizaciones y le otorgan un sentido real. En el principio de la obra sus movimientos son más recatados y elegantes, por ser una mujer de la alta sociedad inglesa. Después de su muerte, se pierde un poco su elegancia y comienza a ser menos medida en cuanto a la relación del espacio con los demás personajes y con respecto a su gestualidad.

Sr Condomine: sus movimientos son precisos durante la primera parte de la escena, es un hombre de la alta sociedad inglesa, reconocido como un gran escritor. Muestra su intelectualidad y superioridad a través de sus gestos, especialmente los que realiza con las manos. Sin embargo, cuando pierde el control de la situación, su gestos faciales son más expresivos y sus movimientos más súbitos y exagerados. Posee una gran movilidad por el espacio, camina por todo el escenario. En relación a su proxemia con los demás personajes es recatado y cuidadoso, está siempre con una distancia moderada, excepto de su esposa Edith a la cual a través de sus gestos le expresa su cariño. También se mantiene más cerca de Elvira su ex esposa.

Elvira: al ser un fantasma es muy dispersa, se mueve mucho por es escenario, para así representar la inestabilidad terrenal de su personaje. Se aproxima a su ex esposo Carlos de una manera confiada e invasiva de su espacio, busca estar lo más cerca posible de él. Tampoco teme en aproximarse a Ruth para molestarla. A través de sus gestos expresa emociones como la ironía, el sarcasmo, la malicia. Tiene una gran movilidad de brazos y piernas, así puede dar a entender su carácter seductivo y divertido.

Madame Arcati: es una mujer extrovertida, sus gestos son muy expresivos y sus movimientos amplios y característicos, a través de ellos da a conocer su personalidad. Tiene una gran movilidad del espacio, recorre el escenario para bailar y hacer su ritual espiritista. No posee ninguna dificultad para acercarse a los demás personajes, en ocasiones invade su espacio personal, que no es bien visto por El Doctor Bradman y la Sra. Bradman. Madame Arcati, posee un aire de superioridad por su título de Madame, que da a entender mediante su presencia escénica, a través de un paso seguro y una mirada firme consigue el respeto de todos los demás.

Doctor Bradman: es un hombre muy elegante y respetuoso. Sus movimientos son muy leves, no se mueve a través del escenario, permanece anclado a un mismo punto a lo largo de la escena. Es muy cuidadoso en el trato con los demás personajes, no los toca ni se les acerca demasiado, a excepción de su esposa la Sra. Bradman. Es un escéptico, en el ritual espiritista realiza muchos gestos de desaprobación y poco convencimiento.

Sra. Bradman: es una mujer jovial y crédula. Está muy enamorada de su esposo el Doctor Bradman y lo da a entender a través de su desplazamiento para tenerlo cerca de ella. Sus movimientos son muy espontáneos a pesar de ser una mujer de la clase alta inglesa, se emociona con facilidad y lo da a entender a través de sus gestos sin ninguna dificultad. No se retrae sus emociones, sino que la expresa al momento.

Edith: es una mujer nerviosa y atolondrada, tiene la cabeza en otra cosa, lo cual da a entender con sus movimientos bruscos por el escenario, es torpe y poco elegante. Hace buen uso del espacio, corriendo a veces por él, por siempre estar apurada. Tiene un gran distanciamiento con respecto a los demás personajes, no se les acerca demasiado por un acto de respeto.  Es miedosa, hace movimientos con las manos y los pies de inseguridad. 

Palabra y tono

La forma de hablar de los señores Bradman y Condomine corresponde a  familias de la alta sociedad inglesa: formal, elegante y respetuosa. El sarcasmo es un factor notorio, especialmente en el Doctor Bradman, quien desconfía totalmente de las cualidades especiales de la médium, Madame Arcati. Estas características, aunadas a las claras líneas y gestos burlones de los personajes hacia la médium, denotan lo rígida y prejuiciosa que era la sociedad inglesa. Esta fiel representación se expone como una crítica al sistema social de la época.

Madame Arcati, por su parte, tiene un lenguaje muy adecuado para la alta sociedad, solo que se ve trastocado con su alocada, suelta y expresiva personalidad. Esta combinación muestra el contraste entre querer encajar en un sistema social y, al mismo tiempo, la apertura a nuevas ideologías y formas de vida, como lo es la comunicación con los espíritus.

Edith y su forma de hablar es la máxima representación de lo cuadriculada y formal que era la sociedad inglesa en cuanto a la relación entre amos y mucamas.

Escenografía, utilería e iluminación

Escena única: Se utiliza un sofá simulado con tres sillas (esto es para mantener el concepto de la obra principal de Francia llamada “Las Sillas”), una mesita individual al lado del sofá con un teléfono de la época, una mesa un poco más larga y alta simulando un bar, encima de este hay botellas y vasos.

Con respecto a los personajes, el doctor Bradman fuma una pipa, algo muy común en la clase alta Inglaterra del siglo XX. Por su parte, Madame Arcati, la médium hechicera, utiliza una bola de cristal y sal y pimienta para hacer sus hechizos. Por último, Edith lleva una bandeja plateada con vasos sobre ella para hacer énfasis en su personaje de sirvienta.









Iluminación: Las escenas se caracterizan por el uso de focos para iluminar a las personas que desarrollan la acción en el escenario, en las primeras escenas la acción se da más que todo en un sofá del lado derecho por lo tanto se utiliza el senil derecho, luego cuando todos se sientan en el medio para realizar el ritual junto a Madame Arcati se usa una luz verde para crear un efecto más inesperado y de suspenso. Más adelante, en el momento en que Madame Arcati  intenta hacer  desaparecer a  Elvira y Ruth cuando ambas son fantasmas, se utiliza un efecto de parpadeo de luces para que crear mayor suspenso en el escenario. De resto, más que todo se ilumina la parte del escenario donde se desarrollan las acciones, al igual que el pasillo cuando alguno de los actores sale o entra en escena por el mismo.

Vestuario y maquillaje

Carlos: Es un escritor millonario inglés. Usa un pantalón de vestir negro, una camisa de botones blanca, unos tirantes de color beige o dorados y unos zapatos de cuero negros. Tiene bigote y su cabello está peinado hacia atrás con gel dando un aspecto impecable.




Ruth: Lleva un vestido rosa claro con encaje y de mangas largas. Usa medias pantis, tacones y accesorios muy sutiles, como un collar y zarcillos de perlas, que remarcan su alto status social. Tiene el cabello recogido con un moño a un lado de la cabeza. Su maquillaje es sencillo pero destacando los contornos para dar un aspecto europeo.

Cuando aparece como muerta, lleva puesta un poncho igual al de Elvira pero de color azul.





Elvira: Utiliza un poncho hasta la rodilla de color verde, de un tipo de tela ligera que le permita tener un aspecto fantasmal. Usa tacones también por haber sido una mujer de dinero. Tiene el cabello suelto. Su maquillaje es más pálido que el de los demás para resaltar el hecho de que está muerta, con pómulos destacados y labios rojos dando un aspecto provocativo.




Madame Arcati: Usa una falda larga hasta el piso negra y una camisa blanca con faralaos. Lleva alrededor del cuello varias bufandas. Usa zarcillos largos de monedas, guantes rojos, una cartera que contiene una bola de cristal, y en el cabello lleva una cinta. Su maquillaje es mucho más exagerado, con sombras azules y labios rojos para destacar su personalidad extrovertida.





Doctor Bradman: Su ropa es formal, siempre luce elegante y sobrio. Usa un traje negro, una camisa marrón y una corbata negra. Lleva zapatos de vestir negros y medias negras. Su peinado es clásico con gel. Utiliza una pipa.




Sra Bradman: Su estilo es más recatado que el de los demás por ser una señora de unos 50 años. Lleva puesto un saco azul marino y una falda negra hasta la rodilla. Usa medias pantis, un collar grueso de perlas, tacones negros y un abanico. Tiene el cabello recogido con un moño hacia atrás. Su maquillaje es sencillo, destacando los contornos para dar un aspecto europeo.





Edith: Tiene un vestido blanco de mucama con un delantal negro. Usa zapatillas negras. Su cabello está recogido con un moño y lleva una venda blanca en la cabeza. Su maquillaje es muy suave, casi imperceptible.

Cuando sale con el pijama, este es de color gris.






Musicalización

En cuanto a la musicalización, en nuestra propuesta, no fue un tema de mucho debate. La verdad es que música como tal, no está planteada más que en una ocasión. De resto, decidimos la utilización de sonidos “onomatopéyicos” que dieran sentido a la interpretación. Sonidos como timbres de puerta, de teléfono, el sonido de un carro arrancando (en la escena específica de la salida de unos personajes, antes de morir), etc.

La única canción que se utiliza en nuestra representación es “Silencio” de Beethoven. Esta canción tiene un tono místico, al oírla da oscuridad y misterio al ambiente. Es una canción con piano y cuerdas donde el piano toca arpegios menores que generalmente se relacionan con esta oscuridad y tenebrismo del que estamos haciendo referencia. Este tema suena en el momento en el que Madame Acarti (uno de los personajes principales) prende la radio para la sesión de espiritismo.


La razón por la cual no se utiliza mucha musicalización para ambientar las escenas es que son demasiado dinámicas. La interacción y el diálogo entre personajes tienen que ser inmediata. Perderse de una palabra puede arruinar el entendimiento de toda la trama. Es por eso que la música no debe interferir con la captación de lo hablado en ella. Además, la intensidad, la intención, el carácter y el contexto lo logran plantar los personajes a través de su actuación y reacciones medida que va transcurriendo la obra.